El documental Objetos Rebeldes , dirigido por la cineasta costarricense Carolina Arias, es una producción que invita al espectador a reflexionar sobre la memoria cultural y los vacíos que existen en la historia de Costa Rica. Este largometraje, que ha obtenido reconocimiento internacional y premios nacionales, entre ellos el Premio Nacional de Artes Audiovisuales Amando Céspedes Marín 2020 a la Mejor Producción, es una pieza clave del cine documental costarricense contemporáneo.
Con una duración de 90 minutos, Objetos Rebeldes explora el misterio que rodea a las icónicas esferas de piedra del sur de Costa Rica, elaboradas por los antiguos habitantes precolombinos. A lo largo de los años, más de 300 de estas esferas han sido descubiertas, aunque muchas fueron saqueadas y dispersadas. El documental se centra en la arqueóloga Ifigenia, quien ha dedicado su vida a desentrañar los secretos de estos fascinantes objetos. A través de su mirada, Arias plantea preguntas profundas: ¿Por qué estas esferas, símbolo de una rica herencia cultural, han sido en gran parte olvidadas o ignoradas por la sociedad costarricense contemporánea? ¿Qué nos dicen estas «fisuras» en nuestra memoria colectiva sobre nuestra relación con el pasado?
El documental, que ha sido apoyado por el Fondo para el Fomento Audiovisual y Cinematográfico «El Fauno» del Centro de Cine en 2017 y por el Programa Ibermedia en 2018, ofrece una narrativa visual y emocionalmente cautivadora. La dirección de fotografía a carga de Esteban Chinchilla captura con precisión la majestuosidad de las esferas y los paisajes donde se hallaron, mientras que la música de Grecia Albán acompaña de manera sutil el viaje introspectivo del filme. Ximena Franco, a cargo de la edición, articula las imágenes con una fluidez que permite al espectador sumergirse en la historia.
La producción de Objetos Rebeldes estuvo en manos de Alexandra Latishev y Federico Montero, junto a las casas productoras Linterna Films, Mito Prods y Milagros Prods. Este equipo logró no solo consolidar un proyecto artístico de alto nivel, sino también llevar la película a escenarios internacionales como el prestigioso Festival Internacional de Cine Documental de Ámsterdam (IDFA), el más importante en su género.
El trabajo de Arias va más allá de la arqueología o la historia. Objetos Rebeldes es una reflexión sobre el olvido, sobre cómo un país puede fracturarse cuando no mira hacia atrás con detenimiento. El documental, en su esencia, cuestiona el papel de la historia oficial y el peso de los vestigios materiales como guardianes de la memoria colectiva. ¿Qué nos dicen las esferas de piedra sobre quienes somos hoy como sociedad? ¿Qué implica el olvido de estos objetos rebeldes que insisten en recordarnos nuestra conexión con el pasado?
Esta producción no es solo un logro cinematográfico, sino un llamado a reconsiderar la relación de los costarricenses con su patrimonio cultural. Es una pieza que invita al diálogo sobre el presente a través de los ecos del pasado, interpelando a sus espectadores con la profunda interrogante: ¿Cómo es que se fracturan las cosas y por qué preferimos a menudo ignorarlas?
En resumen, Objetos Rebeldes no es solo un documental sobre esferas de piedra; es una exploración poética y crítica de las «fisuras de nuestra memoria», como las describen la misma sinopsis. Con su mezcla de historia, arqueología y crítica social, Carolina Arias ha creado una obra que trasciende el documental tradicional, convirtiéndolo en un espejo en el que podemos observar nuestra relación con el pasado y su impacto en nuestra identidad actual.
