A partir del 1 de octubre de 2024, el sistema judicial costarricense experimentará una transformación significativa con la entrada en vigencia del nuevo Código Procesal de Familia. Este cambio afectará a los juzgados que manejan temas de familia, pensiones alimentarias, violencia doméstica, asuntos relacionados con la niñez y adolescencia. Conozcamos algunas de las novedades más importantes de esta reforma.
Unificación de Normas Procesales
Hasta ahora, las reglas procesales en el ámbito del derecho de familia estaban dispersas en diversas leyes. El nuevo Código Procesal de Familia unifica toda la regulación en un solo documento, lo que representa un avance histórico para el derecho familiar en Costa Rica. Según Eddy Rodríguez Chaves, juez y gestor de la Comisión de la Jurisdicción de Familia del Poder Judicial, esta consolidación facilitará la comprensión, aplicación de la ley, proporcionando mayor claridad y coherencia en los procedimientos.
Aplicación del Código en Nuevos Casos y Opciones para Expedientes en Curso
Uno de los cambios más relevantes es que todos los procesos de nuevo ingreso estarán sujetos a las disposiciones de este nuevo código. Sin embargo, los casos que ya estaban en trámite antes del 1 de octubre tendrán una opción especial: la persona juzgadora deberá informar y consultar a las partes involucradas si prefieren continuar bajo las leyes anteriores o adoptar las nuevas normativas para su caso particular.
Audiencias de Conciliación y Participación de las Partes
El Código también establece que los despachos deberán convocar a las partes a audiencias de conciliación en aquellos casos donde la ley lo permita, con el fin de resolver conflictos de manera amistosa. Aunque la asistencia a estas audiencias es opcional para las partes involucradas, se fomenta su participación para buscar soluciones más rápidas y menos conflictivas.
Lenguaje Comprensible y Representación Legal
Un aspecto destacado del nuevo código es la obligación de utilizar un lenguaje claro y accesible para todas las personas. Este cambio busca garantizar que las personas involucradas en un proceso legal puedan entender plenamente lo que se discute y decide en su caso.
Además, el código establece que las personas mayores de 12 años tienen el derecho de presentar un proceso familiar y elegir a una persona que las represente. En cuanto a la representación legal, es obligatorio contar con un abogado o abogada en procesos que generen cosa juzgada material, como divorcios, separaciones judiciales, y reconocimientos de unión de hecho. Sin embargo, en casos que no produzcan cosa juzgada material, como visitas, custodia, o salidas del país, no es obligatorio contar con una persona abogada, aunque se recomienda buscar asesoría legal adecuada.
Derechos de las Personas Usuarias y Adaptaciones Procesales
El nuevo código reconoce el derecho de las personas usuarias a que sus circunstancias personales, como la edad o la discapacidad, sean tomadas en cuenta durante el proceso judicial. El juzgado tiene la obligación de garantizar que todas las partes puedan participar en condiciones equitativas. Esto incluye, por ejemplo, facilitar la comunicación en casos que involucren a personas indígenas, adaptando el proceso para respetar y considerar su contexto cultural.
Conclusión
El nuevo Código Procesal de Familia representa un cambio fundamental en el sistema judicial costarricense, buscando mejorar la eficiencia, accesibilidad y equidad en los procesos familiares. Es esencial que las personas que puedan verse afectadas por estos cambios estén informadas y preparadas para adaptarse a las nuevas normativas. Este 1 de octubre marca el inicio de una nueva era en la justicia familiar en Costa Rica, enfocada en la simplificación de procesos y el respeto a los derechos de todas las personas involucradas.
