Del 2 al 4 de octubre de 2024, Costa Rica será sede del VI Encuentro Iberoamericano de Investigación en Didáctica de las Ciencias Sociales, donde se abordará el tema «Democracias y ciudadanías en riesgo: Perspectivas de estudio e investigaciones en didáctica de las ciencias sociales en Iberoamérica”. Uno de los trabajos que se presentará es la ponencia titulada Conociendo la historia de la Amazonía a través de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) , a cargo de José Lisbinio Cruz Guimaraes, María Cristina Arimuya Huayta y César Augusto Ríos Ramírez. Este estudio ofrece un enfoque innovador para mejorar la comprensión de la historia y la cultura amazónica entre los estudiantes.
Innovación educativa en la Amazonia
La investigación se centró en aplicar estrategias didácticas apoyadas por las TIC en aulas urbanas y rurales de Iquitos, Perú, durante 2023. El objetivo principal fue que los estudiantes comprendieran la relevancia de los pueblos originarios amazónicos, cuya existencia es clave para la preservación de la naturaleza. Con la participación de 480 alumnos, se utilizaron herramientas tecnológicas como software educativo y libros interactivos multimedia (EDILIM) para promover el aprendizaje activo, permitiendo a los estudiantes construir su conocimiento a través de la experimentación e innovación.
Conectando a la Amazonía con la ciudadanía
El uso de estas estrategias tecnológicas resultó en un incremento significativo en la comprensión de los alumnos sobre la importancia de los pueblos originarios. La investigación destaca cómo la integración de la tecnología en el currículo de Ciencias Sociales puede hacer que la enseñanza de la Amazonía sea más accesible, relevante y participativa. Asimismo, la ponencia subraya la necesidad de repensar el enfoque educativo sobre la Amazonía, frecuentemente marginado en la historia oficial, y proponer su inclusión desde una perspectiva más amplia e interdisciplinaria.
Un legado por preservar
Los autores concluyen que la implementación de TIC no solo mejora el aprendizaje, sino que es esencial para educar a las futuras generaciones sobre la historia y los conocimientos ancestrales de los pueblos amazónicos. Este enfoque puede contribuir a la construcción de una ciudadanía más consciente , comprometida con la preservación del medio ambiente y las culturas indígenas.
Este tipo de investigaciones demuestra el potencial transformador de la tecnología en la educación , el papel crucial que juega en la formación de ciudadanos críticos y comprometidos en contextos como la Amazonía, que históricamente ha sido relegada en los circuitos académicos y educativos.
Avances Normativos y la Ampliación Extractiva en la Amazonía: El Caso del Petróleo y los Pueblos Indígenas
En la última década, se ha registrado un avance importante en el reconocimiento de los derechos de la naturaleza, los derechos colectivos de los pueblos y nacionalidades indígenas en varios países sudamericanos. Sin embargo, este marco normativo se ve frecuentemente subordinado a intereses estratégicos de desarrollo económico, en particular en el ámbito de la explotación petrolera, que sigue siendo uno de los motores principales de las economías de la región. El Ecuador es un ejemplo emblemático de esta contradicción entre desarrollo económico y derechos colectivos, particularmente en su región amazónica.
La explotación petrolera en Ecuador se ha concentrado históricamente en la Amazonía norte, en las provincias de Sucumbíos, Orellana y Napo. Sin embargo, en los últimos años, el interés del Estado y de las empresas petroleras ha comenzado a desplazarse hacia la Amazonía suroriente, específicamente a las provincias de Pastaza y Morona Santiago.
Este cambio afecta directamente a siete nacionalidades indígenas que habitan estas áreas: kichwa, sapara, andoa, shiwiar, achuar, shuar y waorani. Sus territorios ancestrales se superponen con bloques de concesión petrolera, lo que amenaza su modo de vida y la preservación de sus recursos naturales.
La Consulta Previa y la XI Ronda Petrolera
Desde 2011, el Estado ecuatoriano, a través de la Secretaría de Hidrocarburos y el Ministerio de Recursos Naturales no Renovables, implementó un proceso de consulta previa para las comunidades indígenas en las áreas de influencia de la XI Ronda Petrolera.
El objetivo era legitimar las actividades de exploración y explotación de los bloques licitados.
A pesar de que el informe oficial calificó la consulta como un éxito, las dirigencias de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) y las liderazgos amazónicos argumentan que el proceso no cumplió con los estándares internacionales de este derecho colectivo, ya que no se garantizó un consentimiento libre, previo e informado, como lo establece el Convenio 169 de la OIT.
El 28 de noviembre de 2012 se pusieron trece bloques en licitación, lo que culminó con la firma de treinta Acuerdos de Inversión Social con representantes de las comunidades afectadas y gobiernos parroquiales.
No obstante, solo cuatro bloques suscitaron el interés de empresas petroleras: China Andes Petroleum para los bloques 79 y 83, la española Repsol (a través de su subsidiaria en Cuba) para el bloque 29, y PetroAmazonas en consorcio con ENAP de Chile y Belorusneft de Bielorrusia para el bloque 28.
Impacto en las Nacionalidades Indígenas
La entrada de las empresas petroleras en la Amazonía suroriente supone un grave riesgo para las nacionalidades indígenas, quienes dependen directamente del ecosistema amazónico para su subsistencia. Los efectos de la explotación petrolera, como la contaminación de ríos y suelos, la deforestación y el desplazamiento de comunidades, son bien documentados en otras regiones amazónicas y, a menudo, tienen consecuencias irreparables para las culturas indígenas.
A pesar de las promesas de desarrollo económico y social que acompañan a los acuerdos de inversión, las comunidades indígenas frecuentemente reciben solo beneficios marginales en comparación con los impactos negativos a largo plazo.
El desequilibrio de poder entre el Estado, las empresas transnacionales y las comunidades indígenas se ve reflejado en la imposición de proyectos extractivos, que ponen en peligro los derechos territoriales y culturales de estos pueblos.
Reflexión Final
El caso de la expansión petrolera en la Amazonía ecuatoriana refleja una tensión constante entre el desarrollo económico ,la protección de los derechos de la naturaleza y de los pueblos indígenas. Aunque se ha avanzado en la creación de un marco normativo que reconoce estos derechos, su implementación efectiva sigue siendo un desafío, especialmente cuando los intereses extractivos prevalecen.
Es esencial que los Estados y las empresas involucradas respeten los procesos de consulta previa, garantizando que las decisiones sobre la explotación de los recursos naturales se tomen con el consentimiento libre e informado de las comunidades afectadas.
Solo así se podrá avanzar hacia un modelo de desarrollo más justo y sostenible para la Amazonía y sus habitantes.
