Investigadores de la Universidad de Texas en El Paso y la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH) han puesto en alerta sobre un crecimiento significativo en el flujo de caravanas de migrantes hacia la frontera de México con Estados Unidos. Este fenómeno, según su estudio, está siendo alimentado por una combinación de factores, entre ellos la fe religiosa y una desinformación calculada, promovida por lo que han denominado «la industria de la migración», compuesta por grupos criminales que lucran con la vulnerabilidad de los migrantes.
La coincidencia de las elecciones presidenciales tanto en Estados Unidos como en México este año agrega una capa adicional de complejidad a esta situación migratoria. De acuerdo con el análisis de las universidades mencionadas, se espera un aumento considerable en el flujo migratorio debido a la proliferación de información errónea y a las propuestas antiinmigrantes en Estados Unidos, lo que ejerce una presión adicional sobre México.
Emilio Alberto López, investigador de la UACH, señaló en una entrevista con EFE que los traficantes de personas están capitalizando cambios en la aplicación CBP One, que facilita la obtención de citas con autoridades estadounidenses, para engañar a personas en países de origen haciéndoles creer que es más sencillo y rápido ingresar a Estados Unidos. López destacó que este fenómeno se basa en la fe ciega de los migrantes en Dios, derivada de la falta de información precisa sobre los procesos de asilo y migración.
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en México y Centroamérica también ha lanzado una advertencia sobre el engaño sistemático de migrantes a través de plataformas digitales. Resaltan que las redes criminales buscan aprovechar la vulnerabilidad de los migrantes ofreciendo información falsa, lo que contribuye aún más a la creciente presión migratoria hacia la frontera entre México y Estados Unidos.
Esta situación plantea un desafío no solo para las autoridades migratorias de ambos países, sino también para organizaciones humanitarias y defensores de los derechos de los migrantes. La necesidad de una respuesta integral que aborde tanto las causas profundas de la migración como los riesgos asociados con la desinformación es evidente. La cooperación entre gobiernos, instituciones académicas y organizaciones de la sociedad civil se vuelve fundamental para abordar este complejo problema de manera efectiva y humana.
