La educación pública costarricense cuenta entre sus más firmes defensoras con una figura clave del sindicalismo docente: Gilda Lucrecia Montero Sánchez. Nacida el 28 de octubre de 1967 en el cantón Central de Heredia y residente actual de San Rafael de Heredia, Montero ha dedicado su vida profesional a fortalecer el sistema educativo nacional y a defender los derechos del magisterio costarricense.
Una trayectoria al servicio de la educación
Montero es docente de primaria en el Ministerio de Educación Pública (MEP) y posee una Maestría en Gestión Educativa con énfasis en Liderazgo Docente, obtenida entre 2005 y 2007 en la Universidad Nacional. Esta sólida formación académica ha sido clave en su capacidad de liderazgo y análisis de las políticas educativas nacionales.
Primera mujer presidenta de ANDE
En febrero de 2022, Gilda Montero hizo historia al convertirse en la primera mujer en asumir la presidencia de la Asociación Nacional de Educadores y Educadoras (ANDE), una de las organizaciones sindicales más influyentes del país, con más de ocho décadas de trayectoria. Desde ese momento, ha demostrado ser una voz firme, crítica y propositiva, defendiendo no solo los derechos laborales de los docentes, sino también la calidad y equidad del sistema educativo costarricense.
Defensora de los estudiantes y las comunidades rurales
Durante su gestión, Montero ha sido clara en su posición frente a propuestas gubernamentales que, a su juicio, podrían debilitar el acceso a la educación para los sectores más vulnerables. Una de sus principales críticas ha sido hacia la iniciativa de crear megacentros educativos. En una entrevista con La República, expresó que “el interés superior del menor y su derecho a la educación universal deben prevalecer en cualquier decisión que impulse el Ministerio de Educación Pública”. Esta postura resalta su compromiso no solo con el gremio docente, sino con el bienestar y el derecho a la educación de las niñas, niños y adolescentes de todo el país.
Voz activa en el debate nacional
Montero ha llevado la voz del magisterio a espacios de debate público, participando en programas como Estado Nacional, donde ha expuesto con claridad las posiciones de ANDE frente a las políticas educativas y sociales del gobierno. Su intervención en estos foros ha permitido visibilizar las preocupaciones del sector y proponer soluciones desde una perspectiva de justicia social y equidad educativa.
Compromiso inquebrantable con la educación pública
Hoy, Gilda Montero Sánchez sigue en pie de lucha, convencida de que una educación pública gratuita, inclusiva y de calidad es la base del desarrollo nacional. Su liderazgo ha sido determinante en momentos críticos para el sector educativo, convirtiéndola en una figura respetada tanto por sus colegas como por diversos sectores sociales.
Más que una dirigente sindical, Montero es una educadora que ha sabido llevar la vocación del aula a los espacios de toma de decisión, sin perder de vista su misión principal: garantizar que cada estudiante costarricense tenga la oportunidad de aprender, crecer y construir su futuro.
