En un mundo donde la desigualdad y la falta de recursos educativos son desafíos constantes, dos amigas han decidido hacer una diferencia significativa. A través de su plan altruista, se han comprometido a mejorar la educación y fomentar la lectura en comunidades necesitadas de toda Costa Rica, bajo el nombre Proyecto Ángeles que tiene dos columnas, una de ellas es Maribeth Chaves-Carpio y la otra persona es Sandra Zumbado.
Durante el año, estas amigas, impulsadas por su pasión por la educación y el bienestar social, han trabajado incansablemente para recolectar útiles , materiales escolares, así como libros en buen estado. Estos recursos son donados a diversas instituciones y hospitales, con el objetivo de crear rincones de lectura que promuevan el hábito de leer entre niños y jóvenes.
Además, en diciembre, amplían su alcance al recolectar diarios y juguetes para familias en necesidad, brindando un rayo de esperanza y alegría durante la temporada navideña.
Expandiendo Horizontes
Desde sus inicios, el impacto de su proyecto ha sido notable, llegando a comunidades en todo el país. Entre los lugares beneficiados se encuentran Tibás, Sabana, Moravia, San Mateo, Orotina, San Carlos (Pocosol, Aguas Zarcas, Pital, Crucitas), Heredia (Guararí, Barva, Santa Bárbara, San Isidro, San José de la Montaña, Sarapiquí), Nicoya, Peñas Blancas, Limón (Guápiles, Cariari, Pococí), Tabarcia, Turrialba, Puntarenas, Pérez Zeledón, Islas Venado, Caballo, Islita, Guadalupe, Grecia, Ochomogo, y Upala.
En hospitales como Rafael Ángel Calderón Guardia, San Rafael de Alajuela, Max Peralta de Cartago, San Juan de Dios, San Vicente de Paul, Heredia, el Centro Nacional de Dolor y Cuidados Paliativos, Edgardo Baltodano de Liberia y el Hospital de Niños, han dejado su huella con donaciones de libros.
Además, han establecido rincones de lectura en lugares como San Pablo de Heredia y Pocosol de San Carlos, llevando conocimiento y entretenimiento a quienes más lo necesitan.
Más Allá de los Libros
El alcance de su iniciativa no se detiene en la promoción de la lectura. También han participado activamente en la recolección de fondos para muebles de computadoras, productos de higiene personal, ropa, víveres, y ayudas para hogares de ancianos. Un ejemplo reciente de su compromiso es la recolección de fondos para comprar instrumentos musicales para la escuela de Orochico 2, ubicada en el Territorio Indígena Cabécar en Telire Talamanca.
Esta escuela unidocente, con una población de nueve estudiantes cabécares y bribris, tiene la ilusión de participar, por primera vez, en el desfile del 15 de septiembre con su propia banda, gracias a la generosidad de estas dos amigas y su red de colaboradores.
El Motor de la Solidaridad
Nada de esto sería posible sin el apoyo de cientos de enlaces , ángeles que donan dinero, materiales, tiempo, mano de obra y transporte. La solidaridad y el espíritu comunitario son el verdadero motor detrás de este proyecto, demostrando que cuando se unen esfuerzos, se pueden lograr grandes cosas.
Las amigas detrás de esta iniciativa no solo están mejorando la educación y fomentando la lectura, sino que también están construyendo un legado de esperanza y altruismo. Su trabajo incansable , su compromiso con las comunidades más vulnerables son un testimonio del poder del voluntariado y la importancia de la solidaridad.
Un Futuro Brillante
Con cada libro entregado, cada rincón de lectura creado, y cada sonrisa de un niño, estas amigas continúan su misión de transformar vidas. Su proyecto es un recordatorio de que, con dedicación y compasión, se puede hacer una diferencia real en el mundo. A medida que miran hacia el futuro, siguen inspiradas por las historias de aquellos a quienes han ayudado, y están más determinadas que nunca a continuar su labor en beneficio de la educación y el bienestar social.
