Desde su nacimiento en San José un 28 de septiembre de 1964, Marta Eugenia Esquivel Rodríguez ha estado destinada a marcar una diferencia en la sociedad costarricense. Como la primera de cuatro hermanos, pasó sus años de infancia en la pintoresca zona de Turrialba, donde su familia le inculcó los valores fundamentales que la acompañarían a lo largo de su vida.
Inspirada por su abuelito paterno, uno de los primeros abogados de San José, Marta decidió estudiar derecho. Esta decisión no solo fue un paso hacia su desarrollo académico, sino también el comienzo de una vocación por la justicia y el servicio público que la definiría en los años venideros.
Su trayectoria laboral ha sido un testimonio de su compromiso con la equidad y la justicia. Desde su tiempo como Jueza de Trabajo en el Poder Judicial hasta su nombramiento como Magistrada Suplente de la Sala Constitucional, Marta se enfrentó a desafíos complejos en tiempos difíciles para el país. Su capacidad para resolver problemas delicados con integridad y compasión demuestra su valía como líder y defensora de los derechos fundamentales.
Sin embargo, su mayor desafío llegó con su ingreso a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), donde acumuló el cargo de Presidenta Ejecutiva. Encargarse de una institución con alrededor de 60 mil funcionarios no fue una tarea fácil, pero Marta lo abrazó con determinación y humildad. Reconociendo la dedicación del personal de salud, desde médicos y enfermeras hasta el personal administrativo, se comprometió a representarlos con honor y trabajar incansablemente para mejorar el acceso a la atención médica en todo el país.
La preocupación principal de Marta es asegurar que todas las personas en Costa Rica tengan acceso oportuno a la atención médica que necesitan. Su enfoque en garantizar un trato justo y prioritario para los adultos mayores, así como en brindar atención médica de calidad a los niños sin importar su situación económica, refleja su compromiso con la equidad y la justicia social.
Lo que distingue a Marta como líder es su humildad y su capacidad para escuchar. Reconoce la importancia de poner a las personas en el centro de la institución, valora a sus colaboradores por su trabajo y virtudes. Con un carácter firme pero compasivo, Marta ha demostrado ser una líder que inspira confianza y respeto en todos los niveles de la CCSS.
En resumen, Marta Eugenia Esquivel Rodríguez es más que una presidenta ejecutiva; es una defensora de los derechos humanos, una líder comprometida con la equidad y una voz para los más vulnerables en la sociedad costarricense. Su dedicación a mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos es un legado que perdurará mucho más allá de su mandato en la CCSS.
