Cesar Meléndez, actor, cantante y gran ser humano de origen nicaragüense
Un ser humano de gran corazón que alcanzo sus sueños con gran esfuerzo ejemplo de vida humilde de muchos inmigrantes.
Una estrella que se apaga dejando un vacio en el plano terrenal, llegaste a estas tierras con sueños que Dios te dejo cumplir, dejando huellas en los corazones de quienes pudimos compartir contigo.
Siempre estuviste ahí para hacer sonreír a quienes necesitaban un espacio para ser feliz y compartiste con el mundo la oportunidad que Dios te dio de ser padre a tus 50 años.
«EL NICA» obra que logro crear una opinión distinta en muchas personas de la realidad que viven los inmigrantes, sensibilizando a muchos que aun después de verla se embargaban de emoción al contar detalles de la misma.
Un ser humano humilde y sensible, amigo e hijo incondicional con tus padres y hermanos, César paso por la vida de muchos dejando un rastro imborrable, sin negar nunca tu sangre nicaragüense, agradeciendo a Costa Rica por la oportunidad de ser un gran actor dentro y fuera de sus fronteras, albergaste un sentimiento que muchos percibían tan solo al conocerte y recibir una gran sonrisa y abrazo del dramaturgo Nicaragüense que jamás politizo su fama y siempre demostró un lenguaje de hermandad y amor por sus dos patrias.
No te diré adiós, si no hasta pronto hermano por que se donde estés tu obra seguirá siendo excepcional, aunque una vez dijiste que no podías ser ejemplo de nadie en tu afán por mantener tu humildad, tus palabras me enseñaron la verdadera esencia de la humildad y hoy que no estas seguirás siendo inspiración para muchos.
¡Hasta pronto amigo!